Esta novela reconstruye un gran amor empezando por su final, la historia de una pareja que, como tantas, se enamoró, vivió una ilusión, tuvo hijos, y peleó contra todo —contra ellos mismos y contra los elementos adversos: la incertidumbre, la precariedad, los celos—, luchó para no rendirse, y cayó varias veces. Cuando el amor se acaba, surge la pregunta: ¿dónde se torció todo?, ¿cómo hemos acabado así?
Todo amor es un relato en disputa, y los protagonistas de este cruzan voces, confrontan recuerdos, discrepan en las causas, intentan acercarse. Feliz final es una autopsia implacable de sus deseos, expectativas y errores, donde afloran rencores sedimentados, mentiras y desencuentros, pero también muchos momentos felices.
Isaac Rosa aborda en esta novela un tema universal, el amor, desde las muchas interferencias que hoy lo dificultan: las condiciones materiales, la insatisfacción vital, el mercado del deseo, el imaginario del amor en la ficción… Porque es posible que el amor, tal y como nos lo contaron, sea un lujo que no siempre podemos permitirnos.
Todo amor es un relato en disputa, y los protagonistas de este cruzan voces, confrontan recuerdos, discrepan en las causas, intentan acercarse. Feliz final es una autopsia implacable de sus deseos, expectativas y errores, donde afloran rencores sedimentados, mentiras y desencuentros, pero también muchos momentos felices.
Isaac Rosa aborda en esta novela un tema universal, el amor, desde las muchas interferencias que hoy lo dificultan: las condiciones materiales, la insatisfacción vital, el mercado del deseo, el imaginario del amor en la ficción… Porque es posible que el amor, tal y como nos lo contaron, sea un lujo que no siempre podemos permitirnos.